Por ejemplo
Mereces más de lo que tienes, y cada día merecerás más y más. Mereces tener un espacio para ti, no para los trastes, no para los papeles, no para los demás. Necesitas un espacio para ti y tu silencio, para tus memorias, tus invenciones y lágrimas. Mereces tiempo para estar contigo misma, para escucharte, para inspirarte, confiar en ti y reconocer lo que necesitas. Tienes el derecho de cambiar lo que no te gusta, de tener tus preferencias y tus propios planes, de administrar tu vida sin pedir el consejo de nadie; de enriquecer tu mente, mejorar tu cuerpo, actuar según los valores en los que crees, cuidar tu salud y sentirte guapa. Mereces también lo que todos defienden, lo que la sociedad te recordó hoy que es importante: tu derecho a la libertad, a tener una voz, a ser auto suficiente... pero más allá de eso, de los justo, de lo general, mereces darle sentido a TU vida, mereces una MEJOR calidad de vida; mereces irte a dormir en paz y despertar cada mañana con entusias